Capitulo 5
Reconocido y Desconocido
Todos se enfretan a la enfermedad llamada vida y mueren, esa frase resono en mi cabeza y justamente eso iva a pasar el dia de hoy, nadie pero absolutamente nadie viviria..
Mi padre dando un salto cayo sobre el hocicó del coyote, y moviéndose con agilidad dio otro salto para darle un corte en el ojo, ocasionándole un gran dolor al coyote, el cual aullando del dolor, le dio un golpe a mi padre, quien salio volando por los aires, estrellándose en una casa, cayo al piso con un fuerte golpe.
Ushio reaccionando de manera molesta, levantándose con un furia la cual se demostraba en sus hermosos ojos, empezó a dispararle, acertándolo todos los disparos el coyote solo aullaba.
-Vamos aprovechemos la situación, todos- decía Joel- ay que atacarlo con nuestras armas, solo le ganaremos si todos peleamos juntos-
Escuchando esas palabras, todos le empezaron a disparar y hacerle cortes, el coyote solo aullaba del sufrimiento, se retorcía y tiraba manotazos para quitarse a todos sus enemigos.
Entonces recibiendo tremendo daño, el gran coyote callo al suelo de una manera demasiado estrepitosa.
Había muerto, había caído ante el poder de nuestras armas.
-Lo logramos- le decía a Ushio, quien entre emocionada y asustada, mantenía su x-gun agarrada con mucha fuerza- Ushio ya puedes bajar el arma-
Bajando el arma, la abrase con fuerza, expresándole en un solo abrazo todo lo que yo sentía por ella, mi amor.
- Muy bonito, muy bonito Raindon- decía mi padre con cara seria
El estaba bien, el golpe no le había ocasionado mucho daño, el nos miraba a ambos con un rostro demasiado serio, aun no aceptaba lo que nosotros sentíamos y nunca lo aceptaría, eso lo sabia, de eso estaba conciente.
- Vamos por soldier, esto será demasiado fácil- decía una chica con que tenia el traje- hay que matarlo y regresar-
La Noche se había apoderado por completo de la ciudad, eso creía, o bueno tal vez era que las nubes se habían extendido en el cielo por completo.
Empezamos a correr siguiendo el río de sangre que había dejado soldierdark, pero antes de poder avanzar una cuadra, algo nos detuvo.
-Que eso es todo lo que pueden hacer?- decía un ser desconocido, estaba de pie justo donde el coyote gigante había caído- ustedes me hacen reír.
Los dioses de la luna nos sonrieron, puesto que en ese momento, la luna lo ilumino, dejando a la vista de todos, el cuerpo despellejado del zorro, y aun mas impactante, enfrente de nosotros se encontraba lo que parecía ser un coyote pero su cuerpo aun mas formado llegando al punto de parecer el cuerpo de un humano, era sorprendente ver lo que había pasado.
El coyote gigante se había transformado para llegar a poder pelear bien contra nosotros.
La lluvia se acercaba, la luna se volvió a esconder para no presenciar la gran batalla que se iba a desencadenar.
Un rayo cruzo el cielo oscuro, iluminando por un pequeño momento a nuestro enemigo, después de varios segundos, otro rayo mas ilumino pero esta vez nuestro enemigo no estaba.
Había desaparecido por completo, las lámparas que iluminaban la calle se apagaron dejando solo a su paso una obscuridad completa.
-Demonios, donde esta??- decía mi padre, con un tono evidente de preocupación- Raindon protege a Ushio-
-Claro padre no me lo debes de recordar-
De pronto un quejido se escucho, el coyote hibrido había atravesado con una lanza echa de huesos, a una chava que llevaba consigo el traje.
-Nooo, Diana- decía Joel, - demonios en donde esta ese coyote-
La chava a la que le decían Diana, había sido atravesada aun lado del corazón, ella estaba tirada en el piso sufriendo un gran dolor.
De un segundo a otro, ella se empezó a convulsionar, y de un golpe, ella cerró los ojos. Había sufrido un infarto a causa de la herida que le habían ocasionado.
El hibrido se mostró ante nosotros, moviendo su mano para que nos acercáramos, el nos estaba retando.
Todos fueron a atacarlo, y yo volteando a ver a Ushio, viéndola directo a sus ojos, la bese, para después ir con los demás a pelear.
El enemigo era demasiado rápido, nadie le acertaba, todos fallábamos, y el nos golpeaba a todos.
Tratando de acertarle dos cortes con la katana, el sin dificultad alguna los esquivo, apuntando su lanza hacia mi lanzo su ataque veloz, no había forma alguna que lo esquivara, ese era mi fin, no podía hacer nada.
Un dolor me recorría el cuerpo, cayendo al piso son poder meter mis manos, me estampe con la cara directo en el suelo.
Un olor, fuerte, e imprégnate estaba en el aire, olía como si hubieran quemado azúcar, al voltear para ver que había pasado me di cuenta que en realidad el no me había dado ningún golpe, había caído al piso porque Joel se había barrido para salvarme de mi muerte eminente, y aprovechando mi padre ese momento de descuido en su defensa, el atravesó con su katana, el hombro del hibrido.
Este sin dolor alguno, rompió la katana en pequeños trozos, y saltando, la propino una patada en la cara a mi padre saliendo a volar de nuevo, para dar, otra vez, en la casa en la que antes había caído, pero esta vez derrumbándose sobre el.
La pelea seguía, no había nada más que decir, los disparos y los cortes, no le daban, era demasiado veloz.
Todos debíamos de tener cuidado de los disparos.
Estábamos débiles y cansados, golpeados a mas no poder, era imposible ganarle.
Y de sorpresa, agitando su cola de coyote, una ráfaga de aire nos azoto a todos lazándonos por el aire para caer bruscamente varios metros después.
No podríamos ganar, habíamos perdido, la muerte nos asechaba y sin prisa alguna nos estaba esperando, lo podía sentir.
El hibrido corriendo a gran velocidad hacia nosotros, se acercaba, para darnos el golpe final, pero para nuestra misma sorpresa se freno de golpe, dando un salto hacia atrás e inmediatamente dando unos cuantos pasos hacia delante, dos grandes hoyos se hicieron en el piso.
De pronto varias corrientes de aire se hicieron sentir y una gran presión le cayo al hibrido encima, aplastándolo y volando sangre por todos lados.
Alguien lo había matado y de eso no había duda, quien lo había echo era alguien demasiado poderoso….
Varios rayos azules, empezaron a verse, varios metros alejados de nosotros, y apareciendo de la nada.
Tres hombres grandes se habían echo visibles, con grandes armas en sus brazos, los tres eran idénticos.
Estaba delirando no había duda…
- Son de gantz México verdad?- dijo uno de los tres extraños que habían aparecido- nosotros somos los únicos sobrevivientes de gantz Juárez y hemos venido a ayudarles-
Las palabras que dijeron, fueron como medicina, que nos devolvieron a todos nuestra vitalidad……..
---------------------------------------------------------------------------
Espero que les haya gustado!!
Les pido unas disculpas a los que esperaban el cap 6(si esk alguien lo espera) el capitulo 6 lo podre poner hasta mas tardar el miercoles!!
hay disculpen pero por problemas personales no traigo absolutamente nada de inspiracion!!
creo lo habran notado en este capitulo!!
Bueno gracias!!
Reconocido y Desconocido
Todos se enfretan a la enfermedad llamada vida y mueren, esa frase resono en mi cabeza y justamente eso iva a pasar el dia de hoy, nadie pero absolutamente nadie viviria..
Mi padre dando un salto cayo sobre el hocicó del coyote, y moviéndose con agilidad dio otro salto para darle un corte en el ojo, ocasionándole un gran dolor al coyote, el cual aullando del dolor, le dio un golpe a mi padre, quien salio volando por los aires, estrellándose en una casa, cayo al piso con un fuerte golpe.
Ushio reaccionando de manera molesta, levantándose con un furia la cual se demostraba en sus hermosos ojos, empezó a dispararle, acertándolo todos los disparos el coyote solo aullaba.
-Vamos aprovechemos la situación, todos- decía Joel- ay que atacarlo con nuestras armas, solo le ganaremos si todos peleamos juntos-
Escuchando esas palabras, todos le empezaron a disparar y hacerle cortes, el coyote solo aullaba del sufrimiento, se retorcía y tiraba manotazos para quitarse a todos sus enemigos.
Entonces recibiendo tremendo daño, el gran coyote callo al suelo de una manera demasiado estrepitosa.
Había muerto, había caído ante el poder de nuestras armas.
-Lo logramos- le decía a Ushio, quien entre emocionada y asustada, mantenía su x-gun agarrada con mucha fuerza- Ushio ya puedes bajar el arma-
Bajando el arma, la abrase con fuerza, expresándole en un solo abrazo todo lo que yo sentía por ella, mi amor.
- Muy bonito, muy bonito Raindon- decía mi padre con cara seria
El estaba bien, el golpe no le había ocasionado mucho daño, el nos miraba a ambos con un rostro demasiado serio, aun no aceptaba lo que nosotros sentíamos y nunca lo aceptaría, eso lo sabia, de eso estaba conciente.
- Vamos por soldier, esto será demasiado fácil- decía una chica con que tenia el traje- hay que matarlo y regresar-
La Noche se había apoderado por completo de la ciudad, eso creía, o bueno tal vez era que las nubes se habían extendido en el cielo por completo.
Empezamos a correr siguiendo el río de sangre que había dejado soldierdark, pero antes de poder avanzar una cuadra, algo nos detuvo.
-Que eso es todo lo que pueden hacer?- decía un ser desconocido, estaba de pie justo donde el coyote gigante había caído- ustedes me hacen reír.
Los dioses de la luna nos sonrieron, puesto que en ese momento, la luna lo ilumino, dejando a la vista de todos, el cuerpo despellejado del zorro, y aun mas impactante, enfrente de nosotros se encontraba lo que parecía ser un coyote pero su cuerpo aun mas formado llegando al punto de parecer el cuerpo de un humano, era sorprendente ver lo que había pasado.
El coyote gigante se había transformado para llegar a poder pelear bien contra nosotros.
La lluvia se acercaba, la luna se volvió a esconder para no presenciar la gran batalla que se iba a desencadenar.
Un rayo cruzo el cielo oscuro, iluminando por un pequeño momento a nuestro enemigo, después de varios segundos, otro rayo mas ilumino pero esta vez nuestro enemigo no estaba.
Había desaparecido por completo, las lámparas que iluminaban la calle se apagaron dejando solo a su paso una obscuridad completa.
-Demonios, donde esta??- decía mi padre, con un tono evidente de preocupación- Raindon protege a Ushio-
-Claro padre no me lo debes de recordar-
De pronto un quejido se escucho, el coyote hibrido había atravesado con una lanza echa de huesos, a una chava que llevaba consigo el traje.
-Nooo, Diana- decía Joel, - demonios en donde esta ese coyote-
La chava a la que le decían Diana, había sido atravesada aun lado del corazón, ella estaba tirada en el piso sufriendo un gran dolor.
De un segundo a otro, ella se empezó a convulsionar, y de un golpe, ella cerró los ojos. Había sufrido un infarto a causa de la herida que le habían ocasionado.
El hibrido se mostró ante nosotros, moviendo su mano para que nos acercáramos, el nos estaba retando.
Todos fueron a atacarlo, y yo volteando a ver a Ushio, viéndola directo a sus ojos, la bese, para después ir con los demás a pelear.
El enemigo era demasiado rápido, nadie le acertaba, todos fallábamos, y el nos golpeaba a todos.
Tratando de acertarle dos cortes con la katana, el sin dificultad alguna los esquivo, apuntando su lanza hacia mi lanzo su ataque veloz, no había forma alguna que lo esquivara, ese era mi fin, no podía hacer nada.
Un dolor me recorría el cuerpo, cayendo al piso son poder meter mis manos, me estampe con la cara directo en el suelo.
Un olor, fuerte, e imprégnate estaba en el aire, olía como si hubieran quemado azúcar, al voltear para ver que había pasado me di cuenta que en realidad el no me había dado ningún golpe, había caído al piso porque Joel se había barrido para salvarme de mi muerte eminente, y aprovechando mi padre ese momento de descuido en su defensa, el atravesó con su katana, el hombro del hibrido.
Este sin dolor alguno, rompió la katana en pequeños trozos, y saltando, la propino una patada en la cara a mi padre saliendo a volar de nuevo, para dar, otra vez, en la casa en la que antes había caído, pero esta vez derrumbándose sobre el.
La pelea seguía, no había nada más que decir, los disparos y los cortes, no le daban, era demasiado veloz.
Todos debíamos de tener cuidado de los disparos.
Estábamos débiles y cansados, golpeados a mas no poder, era imposible ganarle.
Y de sorpresa, agitando su cola de coyote, una ráfaga de aire nos azoto a todos lazándonos por el aire para caer bruscamente varios metros después.
No podríamos ganar, habíamos perdido, la muerte nos asechaba y sin prisa alguna nos estaba esperando, lo podía sentir.
El hibrido corriendo a gran velocidad hacia nosotros, se acercaba, para darnos el golpe final, pero para nuestra misma sorpresa se freno de golpe, dando un salto hacia atrás e inmediatamente dando unos cuantos pasos hacia delante, dos grandes hoyos se hicieron en el piso.
De pronto varias corrientes de aire se hicieron sentir y una gran presión le cayo al hibrido encima, aplastándolo y volando sangre por todos lados.
Alguien lo había matado y de eso no había duda, quien lo había echo era alguien demasiado poderoso….
Varios rayos azules, empezaron a verse, varios metros alejados de nosotros, y apareciendo de la nada.
Tres hombres grandes se habían echo visibles, con grandes armas en sus brazos, los tres eran idénticos.
Estaba delirando no había duda…
- Son de gantz México verdad?- dijo uno de los tres extraños que habían aparecido- nosotros somos los únicos sobrevivientes de gantz Juárez y hemos venido a ayudarles-
Las palabras que dijeron, fueron como medicina, que nos devolvieron a todos nuestra vitalidad……..
---------------------------------------------------------------------------
Espero que les haya gustado!!
Les pido unas disculpas a los que esperaban el cap 6(si esk alguien lo espera) el capitulo 6 lo podre poner hasta mas tardar el miercoles!!
hay disculpen pero por problemas personales no traigo absolutamente nada de inspiracion!!
creo lo habran notado en este capitulo!!
Bueno gracias!!
Última edición por Soldierdark el Dom Nov 21, 2010 7:25 am, editado 1 vez